miércoles, 27 de julio de 2011

El feedback

¡Hola! Yo tengo un blog.

Un blog en el que hago catarsis y le pregunto a la vida: ¿Porque todos con los que me cruzo terminan siendo reverendos hijos de puta? ¿No? Entonces sigo escribiendo y los que me leen me cuentan que también les pasan cosas similares. Tal vez no estoy tan sola en el mundo.

-Fue terrible leer eso. Me habría ayudado tanto si llegaba a mis manos antes.
- Igual ahora la teoría está bastante modificada. Dados recientes descubrimientos, el tema con los hombres-calesita es que PUEDE SER QUE LE GUSTES… pero no lo suficiente como para dejar de hablar con gatos baratos que se encuentra por ahí. Tómalo o déjalo.
- Ayyyy!!! Son todos iguales, no debería pensar así porque me dice mi psicóloga que no son todos iguales pero cada vez escucho más historias parecidas a la tuya.
- Jaja! No, no son todos iguales. En realidad, todo esto pasa porque no se quieren quedar sin el pan y sin la torta. Eso les pasa a todos estos locos indecisos. Hasta que viene una que le rompe el corazón.
- Clarooo, es verdad. ¿Y ahí se vuelve bueno?
- No, ahí se vuelve más hijo de puta. Es un círculo vicioso llamado "MATEMOS AL AMOR". Pobre el amor, yo todavía creo en él.
- Yo lo estoy trabajando en terapia porque no creo en él.
- Realmente hay que ser bastante positivo. Tener un renacer espiritual, un "ver el vaso medio lleno".
- Jajaja! Sos muuuy chamuyera, ¿Te lo dijeron alguna vez?
- Me dijeron tantas BARRABASADAS. “Chamuyera” lo considero un piropo.
- Bueno, sos bastante chamuyera.
- Si, a mucha honra. Es por eso que tengo este trabajo de... blogger.
- Y sí. Si no sabes chamuyar no podrías escribir.
- Eso también es un círculo vicioso: MÁS chamuyo; MÁS escribo; MENOS posibilidades de conseguir pareja, acompañante, amigo con/sin derechos, filito.

martes, 19 de julio de 2011

La profecía

Conocí al hombre perfecto.

Todo comenzó cuando me mando este mensaje:

(…) HOLA MUY LINDA FOTO,ME ENCANTARIA TENER LA POSIBLIDAD DE CHARLAR CON VOS UN RATITO, POR MSN CLARO ESTA,TE PARECERÀ MUY RARO PERO BUENO VI TU PERFIL Y ME MATO TU MIRADA ES MUY DULCE, SE PUEDE SABER Q SOS UNA CHICA QUE VALE LA PENA HABLAR, POR SI TE INTERESA ACA TE DEJO Mi MSN ES alexander29@hotmail.com.ar BUENO NO TE ABURRO MÁS TE DEBO PARECER UN TONTO POR EL MENSAJE ASI QUE DISCULPAME SI TE MOLESTE,ESPERO NO ME INSULTES QUE SIGAS MUY BIEN CUIDATE EXITOS!!! MMM UNA COSA MÁS TENGO LA ESPERANZA Q SEAS LA CHICA DE MIS SUEÑOS JAJA
 

"Quisiera ser el aire que escapa de tu risa
quisiera ser la sal para escocerte en tus heridas
quisiera ser la sangre que envuelves con tu vida
quisiera ser el sueño que jamás compartirías
y el jardín de tu alegría en la fiesta de tu piel.!!"

MI MSN ES: alexander29@hotmail.com.ar es raro mi msn me llamo alejandro pero estaba todos ocupados cuando me lo hice asi q le mande ese queda medio medio pero bue,,,,,,, ojala me agreges no seas tan mala besos
!!!1 (…)

Después me enteré de que le había mandado exactamente el mismo mensaje a cinco de mis amigas, pero no me importo.

Luego comenzamos a hablar un poco más seguido, me contó que en realidad estaba casado. Pero las cosas no estaban muy bien. Y luego dijo algo con lo que terminó por ganarse mi corazón: “Cuando me separe, te invito al cine”.

Además de todo esto, es extremadamente responsable. Un día, hablando de la facultad, me dijo: “La verdad ni idea con qué profesor me anoté. Me anoto por día y horario. Posta, es lo que priorizo por el laburo y el GYM.” Me encanta que se preocupe de esa manera por su futuro y sobretodo me gusta que se preocupe por sus futuros abdominales.

Con el tiempo empecé a conocerlo más en profundidad, me dijo que era muy respetuoso y que si él salía con alguien más iba a procurar que yo no lo supiera. Un verdadero caballero. A las dos semanas, me enteré de que estaba saliendo con una chica, pero seguramente no fue su intención que me enterara.

En algunos de nuestros encuentros, me había contado que en realidad no quería que formalizáramos porque le gustaban todas las chicas con las que salía, entonces no sabía con cuál quedarse. Yo le dije que no importaba, que yo iba a esperar pacientemente hasta que se decidiera. Mantener todas las velitas prendidas por las dudas si se apaga alguna, esa es la cuestión.

Sin embargo, poco después finalmente formalizamos nuestra relación (a pesar de estas pequeñas diferencias) y tuvo que irse de viaje por trabajo. A París, a hacer un curso. Me dijo que, fortuitamente, como tenía un amigo francés, se iba a quedar en su departamento en vez de en el hotel que le pagaba la empresa. Lo único que me pareció un poco raro fue que el amigo no salió en ninguna de las fotos. Pero sí me acordaba que hacía unos meses se había juntado a estudiar con una chica de intercambio. Casualmente también de Francia.

Al regresar me confesó que en realidad, estando en Buenos Aires me había engañado con su amiga francesa y era ella quién lo había invitado a París esperando revivir esa historia de amor. Solo tenía que pagarse el pasaje, para todo el resto alcanzaba con el amor que él estuviera dispuesto a darle.

Afortunadamente para mí, Ale se sintió muy culpable de haber tenido intenciones de engañarme nuevamente. Entonces, fue hasta Francia a disculparse con su querida amiga a quién no le tocó “ni un pelo” (solo el bolsillo y cuando tenía mucho hambre).

Cuando volvió me dijo que me amaba infinitamente y que quería que fuera la madre de sus hijos. Lo perdoné y nos amamos con pasión.

Gracias Ale por ser parte de mi vida. Ojalá nunca me faltes.

jueves, 14 de julio de 2011

Muertos vivos

Creo que llego el momento de volver a escribir. No si es porque se haya dado alguna situación en particular, o porque verdaderamente siento que ahora lo necesito. En realidad, situaciones en particular no me faltan. De hecho, me sobran. Pero no creo que sea por alguna de ellas. Aunque me pasaron un par de cosas un poco traumatizantes…

Caso Número 1: Alguien que me dijo: “Si me hubieses dado bola, no me iba a vivir a Ushuaia”. Posta.

Caso Número 2: Ahora que creo en el horóscopo me di cuenta de que no solo mi signo no es compatible con ningún otro, sino que también soy “el más sensible y romántico del zodíaco”. Muerte.

Caso Número 3: Conocí a alguien a quien le dicen “el tararira”.

Caso Número 4: Llegué a la importante reflexión de que salir con el que MENOS SE DROGA es algo genial a cierta altura de la vida. (Reflexión número 1)

Caso Número 5: Reflexión número 2: En este momento y según mis cálculos hay aproximadamente cinco personas a quienes les caigo muy mal. Trece a quienes le soy completamente indiferente. Y más o menos siete que quieren tener sexo conmigo. Voy genial.

Caso número 6: A veces creo que padezco algo que me gusta llamar “instinto de autodestrucción” o “mecanismo de ofensa”. Implica un comportamiento que tiende a buscar relacionarme ÚNICAMENTE con personas que ignoren mi existencia. (Hey! Vos! Sé que sos una alternativa sana. Ya se me va a pasar la etapa en la que me gustan los pelotudos, esperame.)

Caso número 7: Tengo una lista de reproducción que se llama “Música para bailar sola delante del espejo”

Caso número 8: Reflexión número 3: Aceptar que uno no tiene ni la más puta idea de lo que está haciendo es uno de los actos más valientes.

Caso número 9: Alguien me quiso conquistar diciéndome: “Menos NOVIO, contá conmigo para cualquier cosa. “

Caso número 10: Lo logró.

Caso número 11: Lo último que sé es que “lo dejamos para otro día”.

Caso número 12: La mejor noche del último tiempo fue cuando el dueño de un negocio de tatuajes me pidió el número de teléfono y le dije que no.

¡Nah! Era todo mentira. Hacía mucho que no escribía porque creo que lo que más me inspiraba era la IRA ACUMULADA A PUNTO DE ESTALLAR.

Ahora aprendí a tomar cosas buenas de todos los aspectos de la vida. Estoy viviendo un momento de total paz interior. IN-CRE-I-BLE. Entonces, me di cuenta de que escribo porque pienso mejor de lo que hablo. Escribo porque necesito organizar ideas.  Escribo pero pido perdón a los que saben escribir (y a los que saben leer). Escribo porque me leo y me da risa. Porque me leo y me da vergüenza (No de la ajena, de la propia) Porque me siento en la obligación de contar lo que me pasa, pero más… porque me gusta hacerlo.