miércoles, 9 de marzo de 2011

The revolcadita

Recientemente alguien que me conoce muy poco opinó muy atrevidamente sobre que lo que necesito para estar en paz y armonía de espíritu. No es consumir sustancias psicoactivas hechas a partir de plantas, ni aumentar la frecuencia con la que asisto a mi sesiones de terapia, ni tomarme vacaciones por tiempo indeterminado, ni seguir al pié de la letra los cuatro acuerdos de la milenaria cultura tolteca…”Lo que necesitas es una revolcadita. Así vas a estar más relajada y te vas a preocupar menos por las cosas.”

Después de dudar seriamente de la seguridad informática de mi conexión Wi-Fi, desarmar los artefactos telefónicos en busca de micrófonos y desconfiar del buen uso de las cámaras de seguridad de mi municipio; llegué a la conclusión de que seguramente estaba hablando con una persona demasiado “perceptiva”. 


Sin embargo, reconozco que un poco de razón tiene, pero considero que aquello que me está impidiendo encontrarme con este tipo de compañeros de aventuras fugaces; “one night stand”; garch&go; “Paixão de uma noite que logo tem fim”… es que digo la VERDAD.

El problema es que generalmente digo la parte de la verdad que no me favorece en absoluto: como mencionar problemas médicos, deformidades, falta de deporte, hablar de mi psicóloga, de mis relaciones fallidas, de mis problemas con el exceso de café y bebida cola en mi dieta diaria, poca tolerancia a los efectos del alcohol, que por las noches me dedico a investigar “como desarrollar telekinesis” y finalmente, pero no por eso menos grave, recomendar que lean este blog.
Además hay ciertos puntos a tener en cuenta: Si escribe “dencerio” nunca me va a caer bien, lo mismo que si nunca leyó Harry Potter, si practica mucho deporte, si tiene sobrepeso, si es muy flaco, si vive en zona Oeste, si es futbolista o si trabaja con el padre. Son cosas que ya sé, para que vamos a perder el tiempo, ¿no? No encaja en el ideal que está tatuado en mi inconsciente  por lo que queda automáticamente descartado como posible príncipe azul. Las sorpresas son para los ingenuos. (?)


Siendo sinceros nuevamente, la verdad que esto de pretender tomar decisiones con una bola del tiempo incorporada en el cerebro tampoco está bueno. Es mentalmente agotador. Pensemos menos, revolquémonos más.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Señorita Micaela,
Me parece que maneja muy bien este tipo de expresión, y puedo ver un talento en Ud. Tiene la capacidad de la expresión (con un toque particular, que la hace resaltar)en todas sus formas: oral, verbal, y a través de distintos medios y canales.
Es por todo esto, y como regalo para los que nos llamamos "sus escuchadores"(llamados así porque porque pasamos HORAS MUDOS ante Usted)le solicito que os siga deleitando con algún "vómito" de su originalidad.

Atte.,

Usted sabe... Jajajaj